A partir de hoy, entraron en vigor multas de hasta 567 mil 500 pesos a quien dañe al medio ambiente y altere el ciclo hidrológico al bombardear las nubes y de hasta 333 mil a quienes operen Centros Integrales de Residuos que afecten la zona, no separen los desperdicios o no lleven labores de remediación.
Esto se debe a las reformas que se hicieron al Código para la Biodiversidad del Estado de México, donde por una parte se hicieron adecuaciones para evitar sustancias contaminantes que ocasionen o puedan ocasionar desequilibrios ecológicos o daños al ambiente, incluyendo sistemas antigranizo o cualquier otro mecanismo o tecnología que inhiba, modifique o altera el ciclo hidrológico.
En esta medida se incluye a los proveedores de equipos y servicios relacionados con las fuentes fijas móviles y se pide regular las sustancias en cualquiera de sus estados físicos o de energía, como humo, gases, vapores, partículas sólidas, ruido, vibraciones, energía térmica o lumínica, olores, polvos y líquidos que ocasionen o puedan causar desequilibrios a los ecosistemas o daños al ambiente.
Para quién incurra en esta falta la sanción es el pago de una multa equivalente a mil 250 a 5 mil veces el valor diario de la Unidad de Medida y Actualización vigente al momento de cometer la infracción, la cual en estos momentos es de 113.5 pesos.
Por otra parte, ya operan los ajustes a diversos artículos del mismo ordenamiento, para el manejo integral de los residuos sólidos urbanos y de manejo especial, a través de los rellenos sanitarios, Centros Integrales de Residuos o sitios de disposición final autorizados, donde se deberán considerar los costos asociados a la rehabilitación de posibles afectaciones o de remediación ambiental,
En el caso de los Centros Integrales de Residuos deberán considerar la reducción de residuos de disposición final, las tasas de reciclaje y recuperación de materiales, los cuales serán de acceso público.
Están obligados a separar los residuos sólidos urbanos y residuos de manejo especial del resto de desperdicios que reciban, por sus características.
Los castigos en este caso consideran multas que van de 50 hasta 2 mil 500 UMAS; además del arresto administrativo hasta por 36 horas y la posibilidad de aplicar la ejecución de trabajo en favor de la comunidad que esté relacionado con la protección, conservación y preservación del medio ambiente, en el espacio afectado.
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